Virreinatos en América

Virreinatos y fronteras americanas


El modelo territorial que se implantó en América siguió en gran medida el existente en España y más en concreto el de Castilla. Al nuevo mundo se le aplicaban subsidiariamente las leyes de Castilla. España y América eran dominios del Rey. Legalmente, tanto España como América tuvieron igual categoría. Sus habitantes (españoles e indígenas americanos) fueron vasallos del Rey en igualdad de condiciones y por ser vasallos (personas dependientes del Rey), no podían ser esclavos. Vida económica y cultural en el virreinato. A las distintas regiones americanas les unía el lazo dinástico y una serie de organismos comunes que tenían jurisdicción propia tanto en la metrópoli como en América.  Los naturales de un reino lo eran del otro. Aunque las Indias fueron conformadas sobre el modelo castellano, los propios problemas del mundo americano determinaron una legislación especial para América. La estrecha unión que se dio entre los territorios a ambos lados del océano llegó a ser a veces una verdadera fusión.
Además de las dos Instituciones que controlaban las Leyes americanas (Consejo de Indias desde 1524) y el comercio (La Casa de la Contratación desde 1503), la Administración española se desempeñaba desde el propio continente.


Virreinato

Fue introducido primero en México (Nueva España) en 1535 y más tarde en Perú en 1542. El Virrey era la máxima autoridad en un virreinato. En los primeros tiempos, el nombramiento de virrey se hacía de por vida, luego dicho mandato se limitó a tres años y más tarde se extendió gradualmente hasta los cinco años. Pertenecía a la nobleza española cercana al monarca y ejercía la autoridad suprema dentro de su jurisdicción indiana. Era el jefe civil y militar dentro de su unidad administrativa, dependiendo de él también la justicia, el tesoro y los aspectos seculares del gobierno eclesiástico. Dos siglos después se crearon otros dos Virreinatos: Nueva Granada (1717) y Río de la Plata (1776). 



Gobernación

División político administrativa del territorio, generalmente otorgada al jefe de la hueste conquistadora, por medio de las capitulaciones respectivas y en general, confirmadas después por el Rey como premio y a la vez como único medio de mantener cierto control sobre el desarrollo del territorio. Al comienzo del período español también este nombramiento tuvo un carácter hereditario.
El Gobernador, que también podía ser Capitán General o Presidente era la autoridad máxima en una Gobernación (en su caso Capitanía General o Presidencia). Las Gobernaciones y Presidencias eran gobiernos creados en territorios ya pacificados. La Capitanía General lo era en las guarniciones militares de frontera.


Adelantado

El primero en llegar a un territorio para descubrirlo, explorarlo, conquistarlo e iniciar los asentamientos. El título de Adelantado iba asociado con el de Gobernador y Capitán General, porque a quienes se les otorgó el título, generalmente se les encomendó la exploración, descubrimiento y conquista de un determinado territorio. Generalmente tuvieron la facultad de repartir las tierras y los solares, otorgar encomiendas de indios, dictar ordenanzas y ejercer la jurisdicción civil y criminal; en síntesis, la suma del poder. Tenían funciones y atribuciones muy parecidas a las del Virrey. Eran nombrados por el Rey, en consecuencia eran su representante personal. Su jefe inmediato era el Virrey, pero podía dirigirse directamente al rey cuando lo consideraran necesario.


Real Audiencia 

Tribunal superior de justicia cuyo ámbito territorial era una o varias Gobernaciones. Estaba integrado por el Virrey o por el Gobernador, 4 jueces (oidores) y un fiscal. Informaba al Rey de la conducta de los funcionarios y velaba por la protección de los indígenas y gobernados en general, el cumplimiento del derecho y la aplicación de la justicia.

La primera Audiencia indiana fue establecida en Santo Domingo en 1511 (suprimida al poco tiempo y reinstaurada ya en época de Carlos V en 1526), siguiéndole la de México en 1527, Panamá en 1538, Lima en 1543, Guatemala en 1543, Guadalajara en 1548 y Santafé en Bogotá en 1549. Después con Felipe II se crearon las de Charcas en Perú (1559), Quito (1563), Concepción en Chile (1565) y Manila (1583), lo cual marcó el proceso del control sobre el territorio y del poder monárquico en América. Su rango aumentó al hacérselas depositarias del sello real (real sello), y ser reales chancillerías, tal como acontecía en las cancillerías peninsulares, por lo que se les consideraba representantes de la persona del monarca en sus respectivos territorios.


En el siglo XVII, se repuso la Audiencia de Chile denominándose a partir de ese momento Real Audiencia de Santiago (1605) y se creó la Real Audiencia de Buenos Aires (Río de la Plata, 1661), que tuvo una vida corta, reinstalándose en 1783 . En el XVIII  se crearon además las de Caracas (1786) y Cuzco (1787).

Intendencia.

División territorial creada en España en el siglo XVIII e instaurada en América a finales de dicho siglo. Sustituyó a las Gobernaciones y a los Corregimientos. Los intendentes tenían por misión general,  la defensa del territorio, la promoción de la economía y el resguardo de la hacienda.


Corregimiento o Alcaldía Mayor

Tenían a su cargo los partidos o divisiones de una Gobernación. Correspondían a territorios relativamente extensos, donde existía numerosa población indígena y en los cuales un corregidor nombrado generalmente por la Real Audiencia respectiva, tenía a su cargo la administración de justicia en lo civil y penal, la vigilancia y dirección de las reducciones o pueblos de indígenas y el cobro de los tributos regios.

Cabildo o Municipio

Autoridad máxima municipal compuesta por 2 alcaldes y 4 regidores. Contaba además con alguacil mayor (jefe de la policía municipal), alférez real (heraldo y portaestandarte de la ciudad), depositario general (de los bienes en litigio), fiel ejecutor (inspector de pesas y medidas y de los precios en tiendas y mercados), receptor de penas (recaudador de multas judiciales), procurador general (representante de los vecinos ante el Cabildo) y de un escribano (o secretario que levantaba acta).

Todos los Funcionarios que terminaban su actuación en un cargo eran sometidos a un Juicio de Residencia para constatar si realmente cumplieron debidamente su trabajo.

Hasta el siglo XVIII perduró la primitiva organización de dos Virreinatos:

NUEVA ESPAÑA, con 5 Audiencias y 19 Gobernaciones, y PERÚ, con 5 Audiencias y 10 Gobernaciones.

El principal Virreinato de todos fue el de Nueva España (México). Inicialmente su territorio abarcó una gran extensión cuyo centro natural era el valle de México; comprendía la casi totalidad de lo conquistado hasta entonces, excepto Perú y el Río de la Plata, ya que englobaba las Antillas, la Nueva España propiamente dicha, América Central y Tierra Firme, parte de la actual Venezuela y de la actual Colombia. Cubría la extensión comprendida entre Texas y el Océano Pacífico, en la actual California.

Sobre los cimientos de la monumental Tenochtitlan y sobre el viejo lago de Texcoco, se erigió la capital, ciudad de México, sede de la corte virreinal durante todo el período español. Fue la capital más suntuosa de la América española. El primer virrey fue don Antonio de Mendoza, conde de Tendilla. La organización política inicial dividía el Virreinato en Reinos y Capitanías Generales.




Los Reinos eran los siguientes:

Nueva España (diferente al virreinato en sí)
Nueva Galicia (1530)
Guatemala (1542)
Nueva Vizcaya (1562)
Nuevo Reino de León (1569)
Nuevo México (1598). 
Posteriormente se añadirían Nueva Extremadura (1674) y Nuevo Santander (1746).


Tuvo cinco Reales Audiencias:

México
Guadalajara
Guatemala
Santo Domingo
Manila

Además de un tribunal de Consulado (fundado en 1581), un tribunal de minería, un arzobispo y ocho obispos. Su primera Universidad se fundó en 1551, cuatro meses después que la de Lima. La imprenta empezó a publicar libros en 1539, medio siglo antes que la de Lima, que fue la segunda.

En el siglo XVIII el territorio se dividió en 12 Intendencias:INTEND-1

México
Puebla de los Ángeles
Nueva Veracruz
Mérida de Yucatán
Antequera de Oaxaca
Valladolid de Michoacán
Santa Fe de Guanajuato
San Luis Potosí
Guadalajara
Zacatecas
Arizpe (Sonora y Sinaloa)
Durango.
Todas ellas tomaron su nombre de la ciudad que fue su capital. La ordenanza real que dio origen a las Intendencias consideraba además tres provincias: Nuevo México, Alta o Nueva California y Baja o Vieja California; y una Gobernación, Tlaxcala.


Las Capitanías Generales fueron las de Santo Domingo (1526), Guatemala (1542), Yucatán (1565), Filipinas (1574), Puerto Rico (1582) y Cuba (1607).images

A fines del siglo existían 254 conventos y 1.073 cabildos. Un ejército de 40.000 hombres cuidaba de la seguridad de su territorio. La producción de plata de Guanajuato fue más abundante aún que la de Potosí. Llegó a tener cerca de seis millones de habitantes en las postrimerías del Virreinato.

La Capitanía General de Cuba. Desde el siglo XVI, Cuba dependía de la Real Audiencia de Santo Domingo y estaba bajo el mando del Gobernador y Capitán de Guerra de Santiago. Desde 1553 residía en La Habana y desde 1579 se agregó al cargo de Gobernador, el de Capitán General. Mediante Real Cédula de 8 de octubre de 1607 se dividió la Capitanía General en dos gobiernos, el Occidental con sede en La Habana y el Oriental con sede en Santiago de Cuba. La jurisdicción que abarcaría el gobernador de La Habana fue fijada por el este hasta cincuenta leguas de la ciudad. Su famoso Arsenal era un punto de apoyo indispensable para la defensa y el comercio del imperio español.Spanish_Caribbean_Islands_in_the_American_Viceroyalties_1600

El comercio y cultivo de café, cacao, índigo, azúcar y tabaco sustituía por su excelencia la falta de minerales preciosos. Su posición estratégica hizo a la isla objeto de la codicia de ingleses, franceses y holandeses, especialmente de los primeros. En torno de ella se libraron numerosas batallas navales. Las islas de Santo Domingo, Jamaica y Puerto Rico, pertenecientes al dominio español, experimentaron mil vicisitudes a causa de su posición isleña. A la primera, que teóricamente dependía del virreinato de Nueva España, le tocó sufrir las consecuencias de la guerra entre la Metrópoli y Francia y pasar a ser, temporalmente, parte de la colonia francesa. La segunda se perdió definitivamente a manos de los ingleses.

La Capitanía General de Guatemala (actual territorio de Guatemala, Honduras, Nicaragua, El Salvador y Costa Rica), dependía nominalmente del Virreinato de Nueva España, pero con gran autonomía de aquel. Fue la segunda en importancia del Virreinato, fundada por orden de Carlos V. Hacia 1609, la Real Audiencia dictaminó que el virrey de Nueva España no debería ser, en ningún caso, Gobernador de Guatemala, alcanzando por ello la definitiva autonomía de la región. La primera capital del reino de Guatemala fue Gracias a Dios en Honduras, pero en 1549 fue trasladada a lo que hoy es Antigua Guatemala.

En 1773 una serie de terremotos provocaron un nuevo cambio de capital, siendo el nuevo emplazamiento destinado para albergar la sede de la Capitanía, Nueva Guatemala de la Asunción. Por tener que guerrear constantemente contra los indios y defenderse de los bucaneros, mantuvo un ejército considerable. Además de las minas de plata de Huehuetenaque (hoy Chiantla), producía cacao, cochinilla e índigo. Su población alcanzó cerca de un millón de personas al final del dominio español.

En esta región se crearon 5 Intendencias en 1785:

Chiapas
Guatemala
El Salvador
Comayagua (Honduras)
León (Nicaragua y Costa Rica)



El Virreinato del Perú creado en 1542, fue el más importante de Sudamérica. Comprendió en un inicio y durante casi 200 años gran parte de Sudamérica y el istmo de Panamá, bajo diversas formas de control o supervigilancia de sus autoridades.




Abarcaba una inmensa superficie que correspondía a los actuales territorios que forman parte de la Argentina, Uruguay, Paraguay, Bolivia, Colombia, Venezuela, Chile, Ecuador, Panamá, Perú y toda la región Oeste y Sur de Brasil. Quedaban fuera las costas del Caribe de Venezuela, bajo jurisdicción del Virreinato de Nueva España a través de la Real Audiencia de Santo Domingo, el Brasil portugués y las Guayanas. No obstante, el poder directo del virrey se manifestó sobre Lima, Charcas y Quito, pues éstas no tenían gobernador político.

Mientras tanto, Panamá, Chile y el Río de la Plata eran territorios regidos por Presidentes-Gobernadores (autoridad máxima de una Gobernación que contaba con una Real Audiencia), que además eran Capitanes Generales, por tratarse de tierras en guerra. En consecuencia, actuaban con gran autonomía política dentro de la esfera del Virreinato.

La ciudad de Lima fue la sede del gobierno virreinal y acogió el 15 de mayo de 1544 al primer virrey del Perú, Blasco Núñez de Vela. La tarea de este alto funcionario chocó con los intereses de los encomenderos que, encabezados por Gonzalo Pizarro, se habían alzado en el Cuzco contra las Leyes Nuevas. La guerra civil costó la vida al recién llegado Virrey y sólo a partir de 1555 (mandato de Andrés Hurtado de Mendoza) el Perú comenzó a vivir una etapa de mayor tranquilidad y prosperidad. 

 A partir del siglo XVIII se dividió en ocho Intendencias:

Lima
Trujillo
Cuzco
Tarma
Arequipa
Huancavelica
Puno (desde 1796)

A fines de dicho siglo contaba con una población aproximada de 1.400.000. Es en este siglo cuando se crearon dos nuevos Virreinatos, el de Nueva Granada y el del Río de la Plata, quedando por tanto el del Perú con una menor extensión.

A pesar de ello contaba con grandes recursos. Para darse cuenta de su actividad industrial, en materia de tejidos, basta anotar que de Paita a Cusco había alrededor de 4.000 obrajes o hilanderías. Su Universidad Mayor, la de San Marcos de Lima, fue fundada por Real Cédula el 12 de mayo de 1551. La ciudad de Lima, capital del virreinato, era el centro político-social de la América del Sur. Había un arzobispado y cinco obispados, Tribunal del Santo Oficio y varias Audiencias.

Virreyes del Perú fueron entre otros, el Virrey Toledo, el conde de Superunda, el conde de Villar don Pardo, don Manuel de Amat y don Fernando de Abascal.

Nueva Granada, Virreinato creado el 29 de Mayo de 1717 (suprimido en 1723 y restaurado en 1739). Abarcaba el territorio comprendido entre Costa Rica y el río Darién, con jurisdicción sobre los territorios actuales correspondientes a Colombia, Venezuela, Ecuador y Panamá. Su capital, Santa Fé de Bogotá (el escudo de la ciudad es el mismo que el del Virreinato).

Las consideraciones que manejó la Corona para su creación giraron en torno a dos hechos esenciales. En primer lugar, la zona era la mas importante del continente en cuanto a producción aurífera, y en segundo lugar, su situación estratégica entre los dos océanos y puerta de entrada a la América del Sur, le permitiría enfrentar mejor el contrabando y los ataques piratas y filibusteros del Caribe.

Había sido primero Real Audiencia, creada en 1549 por Felipe II, con el nombre de Nuevo Reino de Granada y dependía del Virreinato del Perú. Constaba de ocho provincias, un arzobispado y siete obispados.

Amenazado constantemente por piratas, constituyó también una apreciable fuerza militar. Su riqueza principal fueron el oro, las esmeraldas, la plata y el platino.

No llegaron a crearse Intendencias en esta región, aunque estaban propuestas Quito, Cuenca, Popayán, Cartagena y Panamá.

La Capitanía General de Venezuela, quedó independizada de este Virreinato en 1777. Antes en 1527, el rey Carlos I había firmado una capitulación con los banqueros alemanes concediéndole el gobierno de Venezuela de forma temporal.

El control español fue restaurado a fines del siglo XVI. En 1717 Venezuela es transferida desde la jurisdicción de la Real Audiencia de Santo Domingo al Virreinato de Nueva Granada. Se destacó económicamente por su riqueza ganadera, que llegó a ser tan apreciable como la del Río de la Plata.

También era rica en cacao, algodón, tabaco y caña, lo que dio lugar a un incremento de la población. Se vio amenazada, como Brasil, por diversas tentativas europeas; después del fugaz auge alemán de principios del siglo XVI, a mediados del XVII tuvo que sufrir el conato de los holandeses, quienes se apoderaron de Curaçao (1634), abriendo comercio con Venezuela. Los ingleses se instalaron, además, por los alrededores, y los bucaneros hicieron víctima a esta región de constantes ataques, atraídos por su riqueza y por las de la feria de Portobelo, a donde acudían comerciantes de toda la América del Sur.
Fue el verdadero nudo mercantil del continente, hasta que se abolió el sistema de galeones y se entregó al comercio la ruta de Magallanes.

Para combatir el creciente influjo holandés, se constituyó la célebre Compañía Vizcaína, cuyas actividades cubren el período de 1728 a 1778. En 1786 se creó la Real Audiencia de Caracas.

La Capitanía General de Chile, dejó de depender del Virreinato peruano sólo hacia 1798. Se componía por entonces de dos Intendencias: la de Santiago y la de Concepción, que se dividían en 22 partidos, con un total aproximado de medio millón de habitantes.

Dada la constante lucha contra los indios y los piratas, así como por haber sido durante un tiempo presidio (Valdivia), la Capitanía General de Chile tuvo un marcadísimo carácter militar.

Sus mayores riquezas fueron el trigo, la vid, el ganado y algunas industrias privadas. Su movimiento comercial pudo disponer de la vía de Magallanes, la de Buenos Aires, la del Perú y la del contrabando, que era la más socorrida de las cuatro. Tenía dos obispos y una Universidad, la de San Felipe.

El Virreinato del Río de la Plata, se creó en 1776, con capital en Buenos Aires. Estaba integrado por las Gobernaciones del Río de la Plata, Córdoba del Tucumán, Paraguay y el Alto Perú.

Virreinato del Río de la Plata


El Virreinato del Río de la Plata, se creó en 1776, con capital en Buenos Aires. Estaba integrado por las Gobernaciones del Río de la Plata, Córdoba del Tucumán, Paraguay y el Alto Perú.
Éste último fue incorporado con la intención de cubrir los gastos de administración y funcionamiento, con los ingresos fiscales provenientes dela producción de plata.
La fundación de esta nueva unidad político-administrativa, respondió esencialmente a factores internos y externos. En primer lugar, la rivalidad comercial entre Buenos Aires y Lima estaba generando un clima de enfrentamiento y separación que amenazaba los intereses económicos de la Corona. En el ámbito externo  influyeron tanto la presencia de contingentes portugueses en la estratégica colonia de Sacramento frente a Buenos Aires, como las incursiones de ingleses y franceses en la Patagonia e islas Malvinas del extremo Sur.

Llegó a tener alrededor de 800.000 habitantes, distribuidos en ocho Intendencias, cuatro Gobernaciones y varias comandancias militares dedicadas a combatir o detener a los indios y contener a los portugueses del Brasil, así como a los  corsarios.

Su límite fue el río Desaguadero y por el Este lindaba con la discutida zona brasileño-platense.

La Universidad de Córdoba, en la ciudad de este nombre, fue un foco intelectual de gran importancia.

Eclesiásticamente dependía del arzobispado de Chuquisaca, ciudad alto peruana donde había además una Universidad. Fue célebre su Colegio de San Carlos, erigido con bienes de jesuitas.

El gran Virrey Vértiz (1778-1783), gran benefactor de Buenos Aires, estableció el alumbrado público. Buenos Aires tenía entonces 12.000 habitantes dentro del recinto de la ciudad, y 24.000 en los alrededores. La ganadería fue su riqueza principal.


En resumen, la organización de la Administración española en América fue compleja, pero capaz de adaptarse a las necesidades en el tiempo y un ejemplo de eficacia. Los vastísimos territorios con sus diferencias étnicas, geográficas, geológicas, climáticas, etc, no fueron impedimento para sostener el Imperio, que finalmente se perdió por causas ajenas a su excelente organización. La formación  de los países de habla española se correspondió en buen número con las fronteras trazadas por España en las que se dividían los territorios, principalmente Virreinatos, Gobernaciones y  Audiencias.

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Fuentes consultadas:

http://www.fmmeducacion.com.ar/Historia/Paseo1/u11/unidad11b.htm

http://www.historiacultural.com/2012/04/encomiendas-coloniales-america.HTML

http://www7.uc.cl/sw_educ/historia/america/html/1_2_1_1.HTML

http://ccat.sas.upenn.edu/romance/spanish/219/07colonial/virreinatos.html

http://www.cuentayrazon.org/revista/pdf/115/Num115_009.pdf

http://www.profesorenlinea.cl/chilehistoria/ColoniaGobAdminis.htm

Luis Alberto Sánchez, Breve Historia de América (Buenos Aires: Losada, 1965), 149-51.

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